Siempre hay un rey sobre un caballo
en las viejas ciudades.
los custodian las fuentes y los niños
y un insólito pájaro.
Cuando los veo pienso que la muerte
mira de las estatuas,
armada hasta los dientes
con sus ojos de bronce clausurados.
Si pregunto por ellos me responden
galopes y batallas,
nunca el caballo libre en las praderas
ni al señor en su casa.
Todos cuentan la historia por las guerras
en las viejas ciudades
y por más que pregunto nadie sabe
describir la morada
donde amasaba pan el panadero
y su mujer hilaba.
La historia que nos cuentan
es historia de una que otra batalla,
pero jamás nos dicen que entre tanto
el labrador sembraba.
Y que segando el trigo de la vida
los jovenes se amaban
mirándose a los ojos
como miro la paz en tu mirada.
Mientras paseamos por la antigua plaza
con unrey a caballo
donde juegan los niños
y las fuentes son catedrales de agua.
Todos cuentan la historia por las guerras
en las viejas ciudades
y por más que pregunto nadie sabe
describir la morada
donde amasaba pan el panadero
y su mujer hilaba.
Poe eso cuando voy en tus pupilas
como mirando el agua
sé que la paz, amor,
es ese pájaro insólito
que, a veces, se posa en las estatuas. |