GIRA ARGENTINA 2007
Durante el mes de septiembre de 2007, Alberto Cortez ofreció seis recitales en el legendario Teatro El Nacional de Buenos Aires, y realizó una gira por el interior que incluyó ciudades como Neuquén, Rosario, Mendoza, Bahía Blanca, Mar del Plata, además de una presentación en la capital uruguaya.
Después de dos años de ausencia, la visita del cantautor tuvo una extraordinaria repercusión mediática, tanto en la prensa gráfica como en los principales programas de televisión y radio del país.
Además del lanzamiento del disco doble “Alberto Cortez, Acústico”, el cantante dio a conocer su audiolibro “Conversando poemas”, en la librería Cúspide de Village Recoleta. La presentación estuvo a cargo del reconocido periodista Juan Alberto Badía, y contó con la presencia de la señora Susana Rinaldi. El público pudo tomar contacto directo con su artista, quien recitó algunos poemas y autografió ejemplares a los muchos cortezianos presentes.
Juan Alberto Badía también brindó un emotivo homenaje televisivo a Alberto Cortez en su programa “Badía en concierto”, con invitados como Horacio Ferrer, María Volonté y Lito Vitale, entre otros. Idéntico propósito tuvo el envío de Víctor Laplace, “Afectos especiales”, con la presencia de varios amigos del cantautor, como Rubén Juárez, Rafael Amor, Fernando Bravo, Estela Raval, Enrique Wolff, José Ángel Trelles y Fanny Mandelbaum.
Cortez asistió como invitado especial a los programas de la señora Mirtha Legrand, Susana Giménez y Nicolás Mancera, entre otros. Uno de sus conciertos en el Teatro El Nacional fue grabado por Crónica TV, y emitido íntegramente en horario central el sábado seis de octubre.
Mención aparte merece el homenaje organizado por la Legislatura porteña, quien declaró al cantautor “Personalidad Destacada de la Cultura” el día 12 de septiembre.
Los siguientes son sólo algunos fragmentos de la prensa gráfica argentina:
Diario La Razón, 8 de Septiembre de 2007.
Alberto Cortez, con el talento intacto, por Geraldine Mitelman.
Como el primer día… Tras dos años de ausencia, vuelve a cantar en Buenos Aires. Hará seis recitales en El Nacional, con los éxitos de su carrera. En noviembre recibirá un Grammy latino por su trayectoria.
´Pasaron muchas cosas buenas y algunas muy malas´, dice Alberto Cortez en el lobby de un hotel céntrico. Al hombre de voz fuerte y cuerpo enorme se le llenan los ojos de lágrimas mientras cuenta que recientemente falleció Raúl, su único hermano. ´Hace diez años quedó ciego a raíz de un accidente automovilístico y entró en una depresión profunda. Murió hace tres semanas´, relata.
Cortez no pudo llegar a La Pampa, la provincia donde nació, para verlo con vida. Eso lo entristece. Y se le mezclan las emociones. Porque también (parte inexplicable de la vida) es tiempo de grandes alegrías. Como la que le generó enterarse de que recibirá, el 7 de noviembre, un Grammy Latino a la trayectoria. O la que le provocan los seis conciertos que dará este fin de semana (y el 14, 15 y 16) en el Teatro El Nacional. Allí, ´y para luchar contra la piratería´, dice que estará sentado después del show firmando ejemplares de su último disco, ´Acústico´. ´Además, la gente aprovecha para decirte lo que significás para ellos´.
Diario La Razón, 11 de Septiembre de 2007.
Garganta profunda, por Javier Firpo.
A los 67, el talentoso cantautor presentó su emotivo show ´Acústico´, y ratificó su gran caudal vocal. Generoso, el pampeano ofreció tres shows de dos horas y cantó todo.
Sin duda alguna, el final fue el ´culpable´ de las lágrimas que atravesaron los rostros de toda la gente que anoche asistió al bello teatro El Nacional. En la vera del escenario, luego de más de dos horas de show, Alberto Cortez extendía sus manos -como si fuera un abrazo de oso- para darse envión para el ´sprint´ final de ´Cuando un amigo se va´, que terminó cantando sin micrófono y demostrando la capacidad torácica, el buen caudal vocal y una potencia poco usual a los 67 años.
El público de pie, al borde del delirio, era más que una prueba fehaciente de un espectáculo de primer nivel y, sobre todo, emotivo, en el cual el cantautor nacido en La Pampa había repasado esos temas imprescindibles de su cancionero, mechados con alguna que otra novedad. En ´A mis amigos´, que entonó con Estela Raval, se conformó un dueto de una potencia singular.
Cortez es un artista de los de antes, que transmite otros valores. Es verdad que arrastra más a veteranos, pero los jóvenes deberían escuchar las letras de sus canciones, verdaderas y complejas historias que no dejan de maravillar, como la conocida ´El abuelo´, o ese delicioso estreno que se llamó ´Lupita´.
Ante tanta oferta porteña, Cortez vale la pena. Es cuerpo y alma. Es compromiso. Es confesional y romántico. Es un volcán en erupción que brinda un espectáculo imperdible.
Diario Clarín, por Diego Jemio, 6 de septiembre de 2007.
Con más de 40 años en escena y 67 de edad, Alberto Cortez sigue dando vueltas por el mundo, escribiendo canciones y prosa y ´ejerciendo de argentino en todas partes´. Ahora, luego de dos años de ausencia, el autor de Cuando un amigo se va y El amor desolado -´son esas canciones que, si no hago, la gente me pega´, bromea- regresa para hacer una serie de conciertos en el Teatro Nacional.
-Son canciones inevitables y de las que no puedo ni quiero escapar. Soy un agradecido del éxito y sería un cabrón si no las hiciese. Esta vez, elegí un repertorio que encaje con esta nueva formación de piano, bajo y batería que algunos llaman unplugged. No me gusta esa palabra. Prefiero decir ´acústico´.
Diario La Nación, por María Fernanda Mugica, 7 de septiembre de 2007.
Después de los recitales en Buenos Aires, Cortez se presentará en Montevideo. De allí volverá a España, luego se presentará en México y el 8 de noviembre estará en Las Vegas para recibir el Grammy latino a la trayectoria.
Según comenta, después de tantos años de carrera, ya no le queda ningún escenario en que le gustaría cantar. ´Desde el Carnegie Hall hasta un palacio deportivo en Ushuaia, he pasado por todo. No tengo cuentas pendientes.´
Durante el mes de septiembre de 2007, Alberto Cortez ofreció seis recitales en el legendario Teatro El Nacional de Buenos Aires, y realizó una gira por el interior que incluyó ciudades como Neuquén, Rosario, Mendoza, Bahía Blanca, Mar del Plata, además de una presentación en la capital uruguaya.
Después de dos años de ausencia, la visita del cantautor tuvo una extraordinaria repercusión mediática, tanto en la prensa gráfica como en los principales programas de televisión y radio del país.
Además del lanzamiento del disco doble “Alberto Cortez, Acústico”, el cantante dio a conocer su audiolibro “Conversando poemas”, en la librería Cúspide de Village Recoleta. La presentación estuvo a cargo del reconocido periodista Juan Alberto Badía, y contó con la presencia de la señora Susana Rinaldi. El público pudo tomar contacto directo con su artista, quien recitó algunos poemas y autografió ejemplares a los muchos cortezianos presentes.
Juan Alberto Badía también brindó un emotivo homenaje televisivo a Alberto Cortez en su programa “Badía en concierto”, con invitados como Horacio Ferrer, María Volonté y Lito Vitale, entre otros. Idéntico propósito tuvo el envío de Víctor Laplace, “Afectos especiales”, con la presencia de varios amigos del cantautor, como Rubén Juárez, Rafael Amor, Fernando Bravo, Estela Raval, Enrique Wolff, José Ángel Trelles y Fanny Mandelbaum.
Cortez asistió como invitado especial a los programas de la señora Mirtha Legrand, Susana Giménez y Nicolás Mancera, entre otros. Uno de sus conciertos en el Teatro El Nacional fue grabado por Crónica TV, y emitido íntegramente en horario central el sábado seis de octubre.
Mención aparte merece el homenaje organizado por la Legislatura porteña, quien declaró al cantautor “Personalidad Destacada de la Cultura” el día 12 de septiembre.
Los siguientes son sólo algunos fragmentos de la prensa gráfica argentina:
Diario La Razón, 8 de Septiembre de 2007.
Alberto Cortez, con el talento intacto, por Geraldine Mitelman.
Como el primer día… Tras dos años de ausencia, vuelve a cantar en Buenos Aires. Hará seis recitales en El Nacional, con los éxitos de su carrera. En noviembre recibirá un Grammy latino por su trayectoria.
´Pasaron muchas cosas buenas y algunas muy malas´, dice Alberto Cortez en el lobby de un hotel céntrico. Al hombre de voz fuerte y cuerpo enorme se le llenan los ojos de lágrimas mientras cuenta que recientemente falleció Raúl, su único hermano. ´Hace diez años quedó ciego a raíz de un accidente automovilístico y entró en una depresión profunda. Murió hace tres semanas´, relata.
Cortez no pudo llegar a La Pampa, la provincia donde nació, para verlo con vida. Eso lo entristece. Y se le mezclan las emociones. Porque también (parte inexplicable de la vida) es tiempo de grandes alegrías. Como la que le generó enterarse de que recibirá, el 7 de noviembre, un Grammy Latino a la trayectoria. O la que le provocan los seis conciertos que dará este fin de semana (y el 14, 15 y 16) en el Teatro El Nacional. Allí, ´y para luchar contra la piratería´, dice que estará sentado después del show firmando ejemplares de su último disco, ´Acústico´. ´Además, la gente aprovecha para decirte lo que significás para ellos´.
Diario La Razón, 11 de Septiembre de 2007.
Garganta profunda, por Javier Firpo.
A los 67, el talentoso cantautor presentó su emotivo show ´Acústico´, y ratificó su gran caudal vocal. Generoso, el pampeano ofreció tres shows de dos horas y cantó todo.
Sin duda alguna, el final fue el ´culpable´ de las lágrimas que atravesaron los rostros de toda la gente que anoche asistió al bello teatro El Nacional. En la vera del escenario, luego de más de dos horas de show, Alberto Cortez extendía sus manos -como si fuera un abrazo de oso- para darse envión para el ´sprint´ final de ´Cuando un amigo se va´, que terminó cantando sin micrófono y demostrando la capacidad torácica, el buen caudal vocal y una potencia poco usual a los 67 años.
El público de pie, al borde del delirio, era más que una prueba fehaciente de un espectáculo de primer nivel y, sobre todo, emotivo, en el cual el cantautor nacido en La Pampa había repasado esos temas imprescindibles de su cancionero, mechados con alguna que otra novedad. En ´A mis amigos´, que entonó con Estela Raval, se conformó un dueto de una potencia singular.
Cortez es un artista de los de antes, que transmite otros valores. Es verdad que arrastra más a veteranos, pero los jóvenes deberían escuchar las letras de sus canciones, verdaderas y complejas historias que no dejan de maravillar, como la conocida ´El abuelo´, o ese delicioso estreno que se llamó ´Lupita´.
Ante tanta oferta porteña, Cortez vale la pena. Es cuerpo y alma. Es compromiso. Es confesional y romántico. Es un volcán en erupción que brinda un espectáculo imperdible.
Diario Clarín, por Diego Jemio, 6 de septiembre de 2007.
Con más de 40 años en escena y 67 de edad, Alberto Cortez sigue dando vueltas por el mundo, escribiendo canciones y prosa y ´ejerciendo de argentino en todas partes´. Ahora, luego de dos años de ausencia, el autor de Cuando un amigo se va y El amor desolado -´son esas canciones que, si no hago, la gente me pega´, bromea- regresa para hacer una serie de conciertos en el Teatro Nacional.
-Son canciones inevitables y de las que no puedo ni quiero escapar. Soy un agradecido del éxito y sería un cabrón si no las hiciese. Esta vez, elegí un repertorio que encaje con esta nueva formación de piano, bajo y batería que algunos llaman unplugged. No me gusta esa palabra. Prefiero decir ´acústico´.
Diario La Nación, por María Fernanda Mugica, 7 de septiembre de 2007.
Después de los recitales en Buenos Aires, Cortez se presentará en Montevideo. De allí volverá a España, luego se presentará en México y el 8 de noviembre estará en Las Vegas para recibir el Grammy latino a la trayectoria.
Según comenta, después de tantos años de carrera, ya no le queda ningún escenario en que le gustaría cantar. ´Desde el Carnegie Hall hasta un palacio deportivo en Ushuaia, he pasado por todo. No tengo cuentas pendientes.´
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